La comida mexicana se construye sobre ingredientes básicos como el maíz, los chiles y el frijol, además de costumbres que han pasado de una generación a otra. Hay platillos que siguen siendo parte esencial de la mesa, sin importar la región o la edad de quien los consume.

Conoce cuáles son los platillos favoritos de los mexicanos, y por qué son clásicos que jamás pasarán de moda.

Comidas favoritas de los mexicanos

• Tacos: el rey de la comida callejera

Los tacos son una de las formas más sencillas y famosas de comer en México: una tortilla, ya sea de maíz o de harina, que se rellena con distintos ingredientes y se acompaña con salsa.

Su fama no se limita al país, también han cruzado fronteras y se han convertido en uno de los platillos mexicanos más reconocidos en todo el mundo. Aunque los más comunes son los de: al pastor, suadero, carnitas, barbacoa, cochinita pibil, de pescado y campechano; este platillo no conoce límites.

Se mantienen vigentes por qué son económicos, rápidos de preparar, se adaptan a distintos ingredientes y forman parte de la vida diaria. Tienen alcance fuera de México, incluso para aquellos mexicanos que viven fuera del país, los tacos aparecen en restaurantes de diferentes países y han inspirado nuevas versiones como los burritos o fusiones con otras cocinas.

• Pozole: historia ceremonial y plato de celebración

El pozole está presente desde la época prehispánica, se preparaba en ceremonias, y con el tiempo se convirtió en un platillo de fiesta en todo el país. Hoy en día, es parte de las celebraciones patrias y de reuniones familiares donde se busca compartir un plato abundante.

Hay rojo, blanco y verde, según la región y los ingredientes que se usen. Es común en convivencias grandes porque rinde mucho y porque simboliza unión.

Además de ser reconocido en el extranjero, es uno de los platos más replicados por los mexicanos que viven en Estados Unidos. Su popularidad se ha extendido tanto, que ahora se puede encontrar enlatado en otros países, listo para calentarse y disfrutarlo.

• Tamales: la comida que une familias y tradiciones

Ya sean hechos en hoja de maíz o de plátano, este platillo tiene una historia muy antigua y se prepara en distintas versiones según la región. Su elaboración acepta cualquier tipo de relleno, convirtiéndolo en un platillo en constante innovación.

La costumbre de organizar una “tamalada” para cocinar grandes cantidades en familia o con amigos mantiene viva esta tradición. Además de comerse todo el año, tienen un papel especial en la fiesta de la Candelaria y en convivencias familiares.

Son parte del desayuno y cena de miles de personas en México, y otras partes del mundo. Hoy en día hay versiones listas para calentarse en microondas y consumirse de inmediato, disponibles en los supermercados y tiendas de conveniencia.

• Mole: la salsa de las ocasiones especiales

El mole engloba diversas salsas hachas con diferentes ingredientes como chiles, semillas, especias y en algunos casos chocolate. Se conoce sobre todo en Puebla y Oaxaca, aunque cada estado tiene sus propias versiones.

Preparar un mole lleva tiempo y esfuerzo, por lo que suele reservarse para fiestas y celebraciones importantes. La mezcla de muchos ingredientes que requieren paciencia y experiencia para lograr su sabor.

Es el plato principal en bodas, fiestas religiosas y reuniones familiares grandes. La gran mayoría de turistas es un plato que buscan probar, quien lo prueba se sorprende por la variedad de sabores que reúne un solo platillo. 

Los platillos favoritos de los mexicanos son parte esencial de la cultura y la identidad mexicana. Representan unión, tradición y celebración, además de estar presentes en la vida diaria. Su consumo en México los mantiene vigentes y su expansión en otros países muestra el valor que tienen como embajadores de la gastronomía nacional.